Martín Boy y Messina se ordenó presbítero el 5 de junio de 1859 en Santiago. Desde esa fecha hasta 1868 fue Teniente Cura de San Antonio de Colchagua (actualmente Chépica). Sirvió a la capellanía del Hospital San Juan de Dios de Santiago durante 1864 y 1865. En Noviembre de este último año y hasta 1868 fue cura coadjutor de San Pedro. También sirvió algunos meses a la capellanía de la cárcel de Santiago. El 19 de abril de 1869 se le nombró cura de Coltauco, parroquia a la que renunció en 1884, después de servir durante 15 años. Desde 1886 hasta 1889 fue capellán del Hospital de Rancagua. Falleció en Curicó el 6 de Diciembre de 1890.

Durante los últimos años de su periodo como cura de Coltauco insistió en varias ocasiones en que la primitiva parroquia de la comuna era “inadecuada” y pidió licencia para edificar otra en 1884.

La vida difícil, los aniegos del Cachapoal, los continuos asaltos y violaciones, el desprecio por las leyes, las juergas, el poco interés de los feligreses por los asuntos de la Fe y su negación para ayudar en la construcción de la nueva iglesia, terminaron con la salud y paciencia del señor Cura don Martin Boy, quien con fecha 1 de noviembre de 1884 solicitó al señor Obispo en Santiago su renuncia, indeclinable a servir la parroquia de Coltauco.

En el año 1875, y durante un año aproximadamente, se nombró como administrador de la parroquia de Coltauco a Macario Navarrete. Párroco que Nació en Santiago el 1 de Marzo de 1839, teniendo por padres a Don Valentín Navarrete y a Doña Juana Vidal. Hizo sus estudios en el seminario de Santiago y se ordenó en 1865. En 1866 se le nombró cura de Colchagua y en 1870 de Melipilla. El 21 de mayo de 1875 fue cura administrador de Coltauco y al año siguiente, desde febrero hasta Julio, sirvió la parroquia de Malloa como cura interino. Desde esta última fecha fue capellán de lo Bravo cerca de Santiago. Falleció el 11 de Febrero de 1887 habiendo cogido el contagio del cólera atendiendo a los enfermos de esta epidemia.